El Trofeo Jules Rimet fue el premio original
para los ganadores de la Copa Mundial. Originalmente llamado Victoria,
pero por lo general conocido simplemente como la Copa del Mundo
o Coupe du Monde, fue renombrado oficialmente en 1946 para honrar
al entonces Presidente de la FIFA Jules Rimet quien en 1929 colaboró
para crear la competición. Diseñado por Abel Lafleur
y hecho de plata esterlina chapada en oro con una base azul de
lapislázuli, medía 35 cm (14 in) de altura y pesaba
3,8 kg (8,4 libras).Se componía de una copa octagonal,
sostenida por una figura alada representando a Niké, la
diosa griega de la victoria. El Trofeo Jules Rimet fue llevado
a Uruguay para la primera Copa Mundial de Fútbol a bordo
del Conte Verde, el cual zarpó de Villefranche-sur-Mer,
justo al norte de Niza, el 21 de junio de 1930. Este fue el mismo
barco que llevó a tierras sudamericanas a Jules Rimet y
a los equipos de Francia, Rumania y Bélgica que participarían
en el torneo ese año. El primer equipo en ganar el trofeo
fue Uruguay, los campeones de la Copa Mundial de 1930.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el trofeo
fue conservado por el campeón de 1938, Italia. Ottorino
Barassi, el vicepresidente italiano de la FIFA y presidente de
la Federación Italiana de Fútbol, retiró
el trofeo en secreto de un banco en Roma y lo escondió
en una caja de zapatos debajo de su cama para impedir que los
nazis se apoderaran de él.
El 20 de marzo de 1966, cuatro meses antes del
inicio de la Copa Mundial de Fútbol de 1966 en Inglaterra,
el trofeo fue robado durante una exhibición pública
en el Salón Central de Westminster. El trofeo fue encontrado
sólo siete días después, envuelto en periódico
al fondo del seto de un jardín suburbano en Upper Norwood,
Londres, por un perro llamado Pickles.
Como medida de seguridad, The Football Association
fabricó en secreto una réplica del trofeo para ser
usada en las celebraciones posteriores. La réplica también
fue usada en ocasiones subsecuentes hasta 1970. Fue vendida en
una subasta en 1997 por £254.500, cuando fue comprada por
la FIFA. El alto precio de venta, varias veces el precio reserva
de £20.000-£30.000, llevó a especulaciones
de que el trofeo subastado no era una réplica, sino el
genuino. Después de la subasta, la FIFA puso en exhibición
a la réplica en el Museo Nacional de Fútbol en Preston,
Inglaterra.
La escuadra brasileña ganó el torneo
por tercera vez en 1970, adquiriendo el derecho de conservar el
trofeo real a perpetuidad, como había sido estipulado por
Jules Rimet en 1930. No obstante, la copa fue robada de nuevo
el 19 de diciembre de 1983, cuando fue tomada de una exhibición
en la sede de la Confederación Brasileña de Fútbol
en Río de Janeiro. El trofeo se encontraba en un gabinete
con un frente de cristal antibalas, pero su parte posterior hecha
de madera fue abierta con una palanca. El trofeo nunca fue recuperado,
lo que sugiere que puede haber sido fundido. Eventualmente cuatro
hombres fueron juzgados y declarados culpables por el crimen.
La Confederación encargó la fabricación de
una réplica, hecha por Eastman Kodak, usando 1,8 kg (3,97
lb) de oro. Esta réplica fue presentada ante el presidente
brasileño en 1984.